martes, 11 de enero de 2022

Problema con la gamuza del saxofón

    Hoy traemos a este blog uno de los percances habituales en los instrumentos de viento: el atasco de una gamuza dentro del tubo. Ocurre cuando limpiamos nuestros instrumentos y afecta a todos en general. En este caso concreto se trata de un limpiador atascado dentro del tudel de un saxofón tenor. Una situación así suele ser bastante angustiosa para la persona que toca el instrumento en cuestión, pues se encuentra ante un contratiempo al que no sabe muy bien como hacer frente.


   El consejo principal en estos casos es no seguir tirando de la gamuza. Cuanto más se fuerce, más comprimida quedará dentro del tubo y más difícil será de sacar. Hay casos en los que a base de forzar lo único que se ha conseguido es romper el instrumento y que la reparación final fuese mucho más costosa de lo que podría haber sido. Por lo tanto, en estos casos, lo aconsejable siempre es venir al taller de reparación donde solucionaremos el problema de manera satisfactoria y en un tiempo relativamente corto.


   Por último, otro consejo para evitar esta situación tan embarazosa a la hora de tener que pasar la gamuza por dentro del tubo, es dejarla antes sin nudos ni apelmazamientos de la tela, lo más extendida posible. Y por supuesto que sea una gamuza específica para el tipo de instrumento que tocamos. Estas prevenciones nos evitarán, casi con toda seguridad, este tipo de contratiempos.

miércoles, 17 de noviembre de 2021

Tipos de flautas

   La familia de la flauta consta de seis miembros principales (aunque también hay miembros menos conocidos). Aunque comparten la misma digitación de notas, existen importantes diferencias en lo referente a la formación de la embocadura, a la cantidad de aire necesario para hacerlas sonar y a las técnicas de respiración. Veamos a continuación las más importantes.

Piccolo

   El piccolo o flautín es el más pequeño de la familia de las flautas, midiendo aproximadamente la mitad de la longitud de la flauta de concierto y sonando una octava más alta que esta última. Se encuentra afinado en Do. Existe un repertorio importante de conciertos, música de cámara y música para bandas escrito para el piccolo, por lo que es habitual que los flautistas lo compaginen a menudo con la flauta soprano. Su sonido es claro y brillante en su registro medio, y penetrante y estridente en su registro superior.

Flauta soprano o de concierto

   Es el más común y conocido de los miembros de la familia de la flauta travesera. Se encuentra afinada en Do y es un instrumento clave tanto en las orquestas sinfónicas como en las bandas de música. Cuenta con un amplio repertorio en diferentes estilos de música, desde la música clásica al jazz. Su sonido es agradable y dulce, y suele estar fabricada en alpaca, o plata, aunque también se fabrica en otros metales como el platino e incluso el oro.



Flauta alto

   Esta flauta de sonido suave está afinada en Sol. El diámetro, el peso y la longitud de la flauta alto son algo mayores que los de la flauta de concierto, y requieren mucho más aire para obtener una buena calidad de tono. Su repertorio es más reducido y su cabeza puede ser recta o curva.

Flauta bajo

   Este misterioso miembro de la familia de las flautas es de mayores dimensiones que la anterior. Está afinada en Do. Se suele usar solamente en conjuntos de flautas. El peso de estas flautas está dando lugar a que hoy en día estén apareciendo accesorios para apoyar el instrumento. Al tener una longitud tan larga su mecanismo necesita de una serie de varillas y palancas para su funcionamiento. El orificio de embocadura es también más ancho, por lo que se requiere más aire y una embocadura más suelta para una buena producción del sonido.

   Hay otras flautas graves más raras como son la flauta contrabajo, la flauta subcontrabajo o la flauta hiperbajo. Esta última alcanza unos impresionantes 15 metros de longitud y la frecuencia de su sonido es tan baja que se considera que está al borde del oído humano. Estas flautas descansan en el suelo con la cabeza torcida horizontalmente. Las composiciones para este tipo de flautas se limitan a música para grupos de flautas y alguna rara composición para solistas. Se fabrican a medida y alcanzan en el mercado precios astronómicos.

     


viernes, 24 de septiembre de 2021

Las 5 reparaciones más habituales del clarinete

   Son muchas y muy diversas las reparaciones que necesitan los instrumentos de viento en general y los clarinetes en particular, pero no todas son igual de habituales. Aquí presentamos las reparaciones más comunes que suele requerir el clarinete:

Ajuste

   Los desajustes se producen por múltiples causas: el envejecimiento del mecanismo, su manejo descuidado o su simple uso habitual. Si una de las llaves está desajustada encontramos que las notas afectadas suenan congestionadas o con un tono deficiente en comparación con las notas adyacentes. También es importante verificar el correcto cierre de todas las zapatillas, pues la más mínima fuga de aire en cualquiera de ellas nos provocara dificultades a la hora de tocar. Para llevar a cabo un proceso de ajuste es de vital importancia conocer los detalles mecánicos del instrumento, pues se trata de un proceso delicado que requiere de experiencia profesional, pero que es imprescindible realizar al clarinete cada cierto espacio de tiempo para que mantenga su buen funcionamiento.

Cambio de los corchos de la espiga de unión

   Las espigas de unión son las partes de acople entre los diferentes cuerpos que conforman el instrumento. Con el paso del tiempo los corchos se van desgastando y van perdiendo su funcionalidad, o bien se rompen directamente, con lo cual se provocan fugas de aire que hacen imposible hacer sonar en condiciones el instrumento. Su sustitución por corchos nuevos es uno de los trabajos más habituales en los clarinetes.



Enzapatillado general

   Al cabo de unos 4 años el clarinete necesita de una sustitución integral de sus zapatillas. Lógicamente esto puede depender de la frecuencia con la que el músico toque, pero generalmente suele ser ese período, ya que el propio paso del tiempo hace mella en el material que conforma la zapatilla y esto acaba afectando a la calidad sonora. La sustitución de zapatillas es sin duda el trabajo más completo que se le realiza a un instrumento de este tipo. Es aprovechado también para sustituir todos aquellos otros materiales que estén deteriorados (corchos, fieltros, muelles, etc.), así como para su limpieza, eliminación de ruidos innecesarios y ajuste final. Un trabajo de este tipo deja el clarinete como nuevo para varios años más, con un perfecto sellado de sus zapatillas que garantizan el máximo rendimiento del instrumento a la hora de sacarle la mejor calidad a su sonido.

Sustitución de muelles

   Es otra de las reparaciones más habituales en el clarinete. No es nada extraño que de repente un día nos encontremos con que una de las llaves de nuestro instrumento se ha quedado sin fuerza, sin tensión. ¿Que ha ocurrido? El muelle se ha roto y el mecanismo ya no funciona correctamente. Se hace entonces imprescindible la colocación de un nuevo muelle para que la llave vuelva a realizar su función. En ocasiones se realiza la sustitución de todos los muelles del instrumento cuando estos presentan un estado general de gran deterioro.

Engrase de tornillos y pasadores

   La limpieza y engrase de los tornillos y pasadores de los instrumentos es uno de los trabajos más importantes para mantenerlos en buenas condiciones. Es aconsejable realizar este trabajo de mantenimiento periódicamente, ya que si no los tornillos se pueden oxidar e impedir el buen funcionamiento de las llaves. La función del aceite es proteger las superficies metálicas interiores de las llaves que están en contacto con los tornillos. Esta película de aceite sirve como lubricante, permitiendo que los componentes metálicos se muevan suavemente, sin entrar en contacto directo entre si. De esta forma, al reducir la fricción, se reduce también el desgaste de las piezas. Otro beneficio adicional del aceite es que, dado que este también protege al metal de la humedad y del aire, evita la oxidación y la corrosión.   

martes, 24 de agosto de 2021

Reparación de una boquilla de saxofón

    En ocasiones se presentan problemas que no tienen que ver con la mecánica de los instrumentos pero si con la emisión del sonido. Un ejemplo es una boquilla dañada por un pequeño golpe que da lugar a que el instrumento ya no suene como es debido. Eso es lo que le ocurrió a la boquilla metálica de saxofón tenor objeto de esta entrada en el blog. Como se puede ver en la siguiente imagen, un golpe torció el borde de la abertura por la que se emite el sonido.



   Esa leve desviación es suficiente para que se pierda más de la mitad del sonido, pues obstaculiza en buena medida el paso del aire necesario e impide que la caña vibre plenamente. Que a nadie se le ocurra intentar reparar algo así a martillazos porque podría causar a la boquilla un daño irreparable. Lógicamente este tipo de accidentes debe tratarse con sumo cuidado y con las herramientas adecuadas para que la pieza retorne a su forma original y el sonido del saxofón vuelva a ser óptimo.


      La boquilla reparada pertenece al tipo Otto Link 7. Se trata de boquillas de gran abertura que producen un sonido oscuro y aterciopelado. Están fabricadas en Estados Unidos y son muy utilizadas en géneros como el jazz, el blues, el rock´n´roll o la bossa nova.

miércoles, 21 de julio de 2021

Reparación del bisel de una flauta

    En este caso tratamos sobre la reparación del bisel de una flauta travesera que se encontraba desoldado. Esta pieza debe ir perfectamente soldada y ensamblada con la cabeza de la flauta, sin la más mínima rendija entre ambas partes, ya que eso provocaría una fuga de aire y en consecuencia que la flauta no sonase correctamente. En este caso el bisel estaba completamente desprendido de la cabeza de la flauta. 



   En este tipo de operaciones la soldadura no solo debe sellar perfectamente la unión entre el orificio de la embocadura y la placa del bisel para que no se produzcan perdidas de aire, sino que debe ser lo más cuidadosa posible para que no queden restos de soldadura y para que el bisel encaje perfectamente con el orificio de la embocadura. Así quedó tras realizar esta operación.


     Se pueden hacer otras consideraciones técnicas sobre la cabeza de la flauta. Por ejemplo, el tubo de esta parte del instrumento es cónico (aunque a simple vista no se aprecie) y se va estrechando hacia el extremo izquierdo. Al final de este extremo encontramos la corona, que es una placa rotatoria unida mediante un tornillo que atraviesa un corcho cilíndrico ajustado al cabezal y que termina en una placa metálica reflectante. No se debe girar la corona, ya que si lo hacemos alteraremos la afinación del instrumento, pero eso ya será una cuestión a tratar en otra entrada de este blog.

     

 

jueves, 24 de junio de 2021

Pieza de clarinete reinstalada

    En esta entrada trataremos sobre el caso de un clarinete que llegó al taller con la pieza que sujeta la llave 6 fuera de su sitio. Fuese por accidente o por defecto de fabricación, el caso es que el agujero guía en el que se enrosca uno de los tornillos de la pieza estaba roto por un lado, por lo que no se podía atornillar. Esto lo podemos apreciar en la siguiente imagen, donde aparece señalado con una elipse blanca el orificio dañado en la madera:


   Por otra parte, debido probablemente a algún forzamiento, el tornillo pasador de la llave 6 estaba partido, habiendo quedado la rosca dentro del pilar de sujeción, como vemos también señalado en esta imagen: 


   Se tuvo que proceder a reconstruir la parte dañada de la madera mediante relleno, de manera que al atornillar la pieza esta quedase firmemente fijada. Hay que tener en cuenta que la pieza en cuestión tiene que soportar la tensión de dos muelles (el de la llave 6 y el de la llave del Re grave), por lo que la sujeción debe ser muy consistente para que no vuelva a saltar.


   Tras haber sacado el trozo de rosca roto del pilar y haber instalado la pieza en su sitio, se le puso un tornillo nuevo a la llave 6 y solo quedó volver a montar las llaves en su lugar correspondiente.






 





miércoles, 19 de mayo de 2021

¿Cuando reemplazar las zapatillas del saxofón?

   Muchas veces nos han preguntado en que momento se debería realizar un enzapatillado completo de un saxofón. Esta pregunta y su respuesta también se pueden aplicar a otros instrumentos como el clarinete, la flauta, el oboe, el fagot, etc. En realidad no hay un espacio de tiempo predeterminado para llevar a cabo un reemplazo general de las zapatillas. Dependerá del uso más o menos intensivo que se haga del instrumento, de su cuidado, de las condiciones ambientales, etc. Lo que si que podemos responder en concreto es que una vez que se rompe alguna zapatilla lo aconsejable es reemplazarlas todas, a no ser que sea relativamente nueva y se haya roto accidentalmente. Es decir, que si observamos que las zapatillas llevan unos años sin cambiarse (pongamos un mínimo de 3 o 4 años), que están desgastadas y han perdido elasticidad, y una o varias de ellas se rompen, lo ideal es acometer el reemplazo general del conjunto, con lo que nos ahorraremos tiempo y dinero.


    En el caso del saxofón alto que aparece en la imagen, este llevaba unos 25 años encerrado en su estuche y sin tocarse para nada. Lógicamente, después de tantos años, las zapatillas y en general toda la mecánica del instrumento necesitaban una reparación completa. En otros casos (sobre todo cuando hay un uso muy intensivo) el recambio puede ser necesario a los 4 años aproximadamente, pues el desgaste de las zapatillas ya se habrá hecho evidente y algunas (especialmente aquellas más cercanas a la boquilla) empezarán a romperse. 

   Un reemplazo integral de las zapatillas del saxofón en el momento en que es realmente necesario, redundará en beneficio de la idónea conservación del instrumento y de la comodidad del propio músico a la hora de hacerlo sonar.