viernes, 24 de septiembre de 2021

Las 5 reparaciones más habituales del clarinete

   Son muchas y muy diversas las reparaciones que necesitan los instrumentos de viento en general y los clarinetes en particular, pero no todas son igual de habituales. Aquí presentamos las reparaciones más comunes que suele requerir el clarinete:

Ajuste

   Los desajustes se producen por múltiples causas: el envejecimiento del mecanismo, su manejo descuidado o su simple uso habitual. Si una de las llaves está desajustada encontramos que las notas afectadas suenan congestionadas o con un tono deficiente en comparación con las notas adyacentes. También es importante verificar el correcto cierre de todas las zapatillas, pues la más mínima fuga de aire en cualquiera de ellas nos provocara dificultades a la hora de tocar. Para llevar a cabo un proceso de ajuste es de vital importancia conocer los detalles mecánicos del instrumento, pues se trata de un proceso delicado que requiere de experiencia profesional, pero que es imprescindible realizar al clarinete cada cierto espacio de tiempo para que mantenga su buen funcionamiento.

Cambio de los corchos de la espiga de unión

   Las espigas de unión son las partes de acople entre los diferentes cuerpos que conforman el instrumento. Con el paso del tiempo los corchos se van desgastando y van perdiendo su funcionalidad, o bien se rompen directamente, con lo cual se provocan fugas de aire que hacen imposible hacer sonar en condiciones el instrumento. Su sustitución por corchos nuevos es uno de los trabajos más habituales en los clarinetes.



Enzapatillado general

   Al cabo de unos 4 años el clarinete necesita de una sustitución integral de sus zapatillas. Lógicamente esto puede depender de la frecuencia con la que el músico toque, pero generalmente suele ser ese período, ya que el propio paso del tiempo hace mella en el material que conforma la zapatilla y esto acaba afectando a la calidad sonora. La sustitución de zapatillas es sin duda el trabajo más completo que se le realiza a un instrumento de este tipo. Es aprovechado también para sustituir todos aquellos otros materiales que estén deteriorados (corchos, fieltros, muelles, etc.), así como para su limpieza, eliminación de ruidos innecesarios y ajuste final. Un trabajo de este tipo deja el clarinete como nuevo para varios años más, con un perfecto sellado de sus zapatillas que garantizan el máximo rendimiento del instrumento a la hora de sacarle la mejor calidad a su sonido.

Sustitución de muelles

   Es otra de las reparaciones más habituales en el clarinete. No es nada extraño que de repente un día nos encontremos con que una de las llaves de nuestro instrumento se ha quedado sin fuerza, sin tensión. ¿Que ha ocurrido? El muelle se ha roto y el mecanismo ya no funciona correctamente. Se hace entonces imprescindible la colocación de un nuevo muelle para que la llave vuelva a realizar su función. En ocasiones se realiza la sustitución de todos los muelles del instrumento cuando estos presentan un estado general de gran deterioro.

Engrase de tornillos y pasadores

   La limpieza y engrase de los tornillos y pasadores de los instrumentos es uno de los trabajos más importantes para mantenerlos en buenas condiciones. Es aconsejable realizar este trabajo de mantenimiento periódicamente, ya que si no los tornillos se pueden oxidar e impedir el buen funcionamiento de las llaves. La función del aceite es proteger las superficies metálicas interiores de las llaves que están en contacto con los tornillos. Esta película de aceite sirve como lubricante, permitiendo que los componentes metálicos se muevan suavemente, sin entrar en contacto directo entre si. De esta forma, al reducir la fricción, se reduce también el desgaste de las piezas. Otro beneficio adicional del aceite es que, dado que este también protege al metal de la humedad y del aire, evita la oxidación y la corrosión.