jueves, 27 de julio de 2017

Reparación de una boquilla de saxofón

   En ocasiones se presentan problemas que no tienen que ver con la mecánica de los instrumentos pero si con la emisión del sonido. Un ejemplo es una boquilla dañada por un pequeño golpe que da lugar a que el instrumento ya no suene como es debido. Eso es lo que le ocurrió a la boquilla metálica de saxofón tenor objeto de esta entrada en el blog. Como se puede ver en la siguiente imagen, un golpe torció el borde de la abertura por la que se emite el sonido.


   Esa leve desviación es suficiente para que se pierda más de la mitad del sonido, pues obstaculiza en buena medida el paso del aire necesario e impide que la caña vibre plenamente. Que a nadie se le ocurra intentar reparar algo así a martillazos porque podría causar a la boquilla un daño irreparable. Lógicamente este tipo de accidentes debe tratarse con sumo cuidado y con las herramientas adecuadas para que la pieza retorne a su forma original y el sonido del saxofón vuelva a ser óptimo.


      La boquilla reparada pertenece al tipo Otto Link 7. Se trata de boquillas de gran abertura que producen un sonido oscuro y aterciopelado. Están fabricadas en Estados Unidos y son muy utilizadas en géneros como el jazz, el blues, el rock´n´roll o la bossa nova.

martes, 4 de julio de 2017

Flauta de madera y plata labrada

   Los viejos instrumentos musicales tienen encanto y carácter. Tienen mucho que enseñarnos sobre la música escrita en los tiempos que fueron hechos. Es el caso de algunas flautas traveseras que han estado en el taller en el último mes para su reparación. Se trataba de flautas del siglo XIX o de la primera mitad del siglo XX, todas ellas construidas principalmente en madera, con tres secciones que forman unidas un tubo de diámetro cónico que se va estrechando hacia el pie del instrumento.

   Entre todas ellas hemos escogido para presentarla en el blog una flauta de madera revestida de plata labrada en la embocadura y las juntas de las tres secciones en que se divide. Esta flauta necesitaba una puesta a punto general después de décadas sin sonar, requiriendo cambio de zapatillas, corchos, limpieza, etc.


   Este tipo de flauta es de sistema simple, diferente al de Böhm extendido hoy en día, y tiene 6 agujeros abiertos junto con tan solo 8 llaves, por lo que su construcción debe datar de los años comprendidos entre 1820 y 1840 aproximadamente. Su embocadura es redonda y su digitación nos puede resultar un tanto incómoda.



   Este tipo de flautas pertenecen a un período histórico que transcurre entre los siglos XVIII y XIX, que está caracterizado por constantes innovaciones técnicas en el mundo de los instrumentos musicales en general y en el de las flautas en particular. La construcción de la flauta de Böhm en 1847 marcó un antes y un después. Hoy es el tipo de flauta travesera más extendido en el mundo. Las viejas flautas de sistema simple fueron incorporando ideas del mecanismo del sistema Böhm y seguirían siendo bastante utilizadas hasta los años 40 del siglo pasado.