martes, 30 de abril de 2019

Diferencias entre clarinetes de sistemas Boehm y Oehler

   Si nos remontamos atrás en el tiempo, los primeros clarinetes tenían un sistema simple con 2 o 3 llaves, pero a medida que los compositores se volvieron mas exigentes con los clarinetistas, los fabricantes de clarinetes tuvieron que ir agregando más llaves para satisfacer esa demanda. Surgían mas alteraciones en la ejecución con digitaciones que requerían innovaciones en la mecánica para poder llevarse a cabo. A mediados del siglo XIX ya estaban muy extendidos los clarinetes de 13 llaves como el que aparece en la imagen.


   Durante esta evolución surgieron varios sistemas según su mecanismo, pero hay dos que son los más extendidos: el sistema Oehler y el sistema Boehm. El primero, también conocido como alemán, es muy utilizado en Alemania, Austria y algunos países de Europa del Este, el segundo (llamado también sistema francés) es más usado prácticamente en el resto del mundo; aunque podemos decir que ambos se pueden encontrar en cualquier país y por eso es cada vez más común encontrar clarinetes de sistema alemán en España.


   El clarinete de la imagen tiene el sistema creado por Oskar Oehler, un clarinetista de la Filarmónica de Berlin que diseñó este sistema a principios del siglo XX. Lo hizo para perfeccionar un sistema anterior conocido como Albert, añadiendo nuevas llaves y cambiando la localización de algunas, consiguiendo así una mayor perfección sobre la afinación y la calidad tonal del instrumento. Su mecanismo está compuesto por 22 llaves, 5 anillos y 4 rodillos. Además la boquilla es más larga que la utilizada en el sistema Boehm y podemos considerar el sonido del instrumento como más denso.

   El sistema creado por Tehobald Boehm para la flauta fue aplicado al clarinete por el clarinetista y compositor francés Hyacinthe Klosé en 1843, cuando se presentó el nuevo sistema al público. Añadió al instrumento 6 anillos móviles (algunos tiene solo 5, como el de la siguiente imagen) y eliminó digitaciones cruzadas o bifurcadas que dificultaban la ejecución de diversos pasajes, modernizando así el instrumento.


   El clarinete Boehm consta de 17 llaves (o 18 si tiene la de Mi bemol grave) y se caracteriza por la claridad de su timbre. 

   A pesar de sus diferencias, ambos sistemas son igualmente válidos a la hora de interpretar música. Las preferencias por uno u otro sistema dependerán de las preferencias y gustos de cada persona.